Si alguien piensa que voy a hablar de la Iglesia Católica
porque preveo un cambio de dirección en ella con la entrada del nuevo Papa, no
es que no me conozca a mí, es que no conoce a la Iglesia Católica. El Papa
Francisco en el mejor de los casos sólo conseguirá que la ilusión sufra un
subidón temporal. El mal siempre está al acecho.
Lo hago, lo de hablar de la Iglesia Católica, porque no
quiero que el 2014 crezca con ideas equivocadas, aunque ya bautizado aspiro a
que cuando llegue Mayo, junto con las flores a María, y reciba la comunión,
sepa con quien se la está jugando.
Hablo de la Iglesia Católica y no de las otras franquicias,
porque a mí la que me ha estado jodiendo toda la vida ha sido aquella y no las
otras, porque vamos, tenderetes son lo mismo. No es que me haya estado jodiendo,
y hablo en los dos planes, metafórico y tal cual, a mí personalmente, por
suerte me he librado, si no que lo ha estado enmerdando todo a mi alrededor
desde que llegué a España y por lo que me he enterado después por los libros y
eso, lo lleva haciendo desde que salieron de las catacumbas. Vamos, de quédate
y no corras, y veras.
Por esa razón yo voy a perorar sobre esta organización, que
no religión, sin olvidar que las otras son igual de nefastas y represoras,
sobre todo las que todo el mundo sabe, no voy a dar nombres que luego vienen
las represalias y si Google me pone una demanda por provocación, pues ya ves
tú.
Debo mostrar, antes que nada, mi estupor ante aquellos creyentes
de buena fe que siguen siéndolo a pesar de La Iglesia Católica. Eso tiene mucho
merito. Ir cada domingo a misa sabiendo que un colega del que da el sermón o el
mismo que da el sermón en cuanto puede le mete mano a los niños, se va de
almuerzo con el poderoso de turno o tiene en nómina a una docena de feligresas
o no sale del convento de monjas de la lado pues….es tener muchas ganas de ir a
misa.
La excusa de “No, yo
es que creo en Dios y lo que hagan algunos curas no me va a influir”, ¡por
favor!, es como que te guste la música de un intérprete que toca sobre el
cráneo de jóvenes sacrificados previa sodomización, “No, es que la música que
sale de sus baquetas me enamora”, ¡por favor!, búscate una religión menos
agresiva y cree en Dios con más tranquilidad, no te quedes con la que has
encontrado al nacer. Se inconformista por lo menos en eso.
La diferencia fundamental entre las multinacionales divinas
y las terrestres es el material que trabajan y en su exclusividad. Las
terrestres tienen que estar constantemente innovando y nunca saben si la
competencia los va a joder. Mientras que las divinas tienen en exclusividad el Más
Allá. Nadie se imagina a El Corte Inglés confesando y dando extremaunciones. Y menos
a la Coca Cola. No digamos a los de Durex.
Las divinas se parecen un poco a las multinacionales
eléctricas en cuanto a que éstas nos sacan a bajo precio las minas de carbón,
de material radioactivo, se quedan por la cara con el agua de lluvia que luego
embalsan en terreno público de dónde sacan los voltios que reparten por todo el
país por medio de torres de alta tensión que colocan donde les sale de los
huevos. Y encima dicen que les debemos dinero. Y encima reparten dividendos. Y
encima contratan de consejeros a personajes políticos que han aprendido gracias
a los años que han estado trabajando, es un decir, para los ciudadanos. Y encima
suben el precio cuando les rota, incluso con procedimientos mafiosos, véase el
último paripé, te subo un 11%, ¡Horror!, bueno solo un 2,3%, ¡Respiro de
alivio!
Pues lo de las divinas todavía es peor. Léase lo que sigue.
Todo empezó “in illo tempore”, cuando nos paso como al
replicante de Blade Runner, nos acongojamos al darnos cuenta de que un día no
amanecíamos. Eso angustia mucho. Un día estás y al otro no. Ahí prendió la
mecha.
El listo tuvo la idea y la dijo,
-No os preocupéis, esta noche he tenido un sueño y Dios me
ha hablado. Nos morimos pero es su voluntad. Él nos está esperando y según nos
comportemos estaremos a su lado o arderemos en el infierno.
Claro, ante esta situación las preguntas le llovieron. ¿Quién
es Dios? ¿Qué es el infierno? ¿Qué es portarse bien? ¿Habrá comida y bebida?¿Nos
podremos llevar la tranca?¿Se puede volver si te arrepientes?¿Y de follar qué?
Y dijo el listo,
-No puedo contestar a tanta pregunta. Dios no me lo ha
contado todo. Sólo habla por mi boca.
Necesito descansar.
Los presentes enseguida se apresuraron a ofrecerle lo mejor
que tenían para que cuando a Dios se le ocurriese que lo encontrase descansado
y relajado. De ahí nacieron las prebendas que los comerciales de Dios siempre
han disfrutado y que en nuestros días aún perviven. Sólo hay que mirar las
sedes de los obispos, las modestas ropas que visten y su vida humilde,
INCISO: No me acordaba de la procedencia del recientemente
descubierto obispo derrochador y he puesto en el Google: “Obispo derrochador
austriaco”, y el buscador me ha dicho: Aproximadamente 31.900 resultados (0,41 segundos),
pero perdona, es alemán. Y entre otras cosas se gasto 31 millones de euros
Con esta situación tan estimulante, como la fiebre del oro
en el Far West, pues pasa lo que siempre ha pasado.
Al listo le salen listillos
y como ni se le había ocurrido patentar el invento, pues van surgiendo las
diferentes
religiones. Se expandieron por la Tierra y comenzó el vaivén. Se escribieron
los libros sagrados, ocurrieron
milagros, se abrieron ríos y se multiplicaron panes
y peces, una virgen parió, un muerto resucitó y el guión cada
vez estaba más
complicado, como en Lost,……y claro, empezaron las dudas: ¿No hay alguna
prueba de todo
esto?
Ahí estuvieron los listos a punto de pringarla, pero Dios
los iluminó y dijo: Fe.
La Fe fue un inventazo. Servía para todo. ¿Y el que no tenía
Fe? Al fuego que también empieza por Efe.
Y desde entonces la maquina no se ha parado. Ha pasado por múltiples
vicisitudes pero siempre ha salido
airosa: Predicando la pobreza, cada vez más
ricos, hablándo a los humildes, pero cenando con los poderosos.
La historia lo
cuenta: Los romanos, el desmadre de los Borgia, la Santa Inquisición....hasta
llegar al siglo XX,
que es lo que a mí me importa.
En este siglo, España está bajo las garras de la Iglesia Católica.
No ha sido posible subirse al carro de la
Reforma y lo que es peor la
Enciclopedia no ha calado en las mentes cerriles de los próceres de la Patria,
lo
que conlleva a una alianza nefasta para el españolito: Si el palo y tente tieso
no te vale, pues un poco de
infierno.
La hostia terrestre y la hostia divina son una combinación
mortal, pues al girar cada una en sentido contrario
si no te dejas llevar, te
deja hecho un asco, en algunos casos hasta te puede dejar fusilado.
Franco bajo palio creo que es la muestra más clara de lo que
estoy diciendo. Un hombre que se levantó
contra la democracia, que fusiló, que
alimentó la codicia y la usura, la injusticia y el abuso, fue tratado por
la
Iglesia Católica como si fuese un hombre excelso. En Internet se puede ver.
Pero hay más. Fruto de la situación tan desahogada que esta
multinacional tenía con su producto en exclusiva
del Más Allá y la herramienta
de la Fe, los abusos no han dejado de suceder: Pederastia, Intromisión en los
asuntos políticos del país cada vez que les rota, Lujo y derroche, Dineros
públicos a tutiplén, Exención de
impuestos, Exigencias ¡Qué flipo! e indicaciones
constantes de cómo ser buenos porque lo que es ellos no
están para esa tontería
de la bondad y la humildad. Claro, como tienen la confesión que luego todo lo
perdona,
¡así cualquiera!
Espero que si el 2014 lee esto le quede claro. Que cuando
llegue la comunión en Mayo, la confirmación en
Julio, el matrimonio en otoño y
la extremaunción en Diciembre, decida lo que decida sepa lo que hay.
Sé que es
duro no poder brincar más allá del 31 de Diciembre, pero eso sería joder al
2015 y eso no está
nada bien. Es ley de vida. Uno tiene que morir para que otro
nazca.
Dos cosas antes de acabar:
Una. Que lo que cuento aquí no es óbice para que cuando me
llegue mi 31 de Diciembre no cambie de
opinión y pida un sacerdote, como le
paso a Miguel de Unamuno, para echar mano de esa fábrica de
irresponsabilidades
que es y será lo de perdonar todos los pecados. Que está bien perdonar un robo o
un
insulto o un escupitajo, pero perdonar un genocidio, un golpe de estado, una
masacre, construir un Valle de
los Caídos con presos, robar niños recién nacidos
, tirárselos, ir vestido de fiesta a un poblado marginal…
me parece que es mucho
perdonar.
Dos. Que lo de la masturbación, lo de quedarse calvo y tener
que llevar gafas, pa mi que va a ser verdad.
Sólo hay que mirar a los mayores
de cincuenta años, incluidos obispos y cardenales. Las mujeres no se
quedan
calvas porque no es lo mismo frotar un botón que darle al palote.
Igual hasta es lo único verdadero de todo lo que la Iglesia
lleva predicando durante siglos.
Y no digo nada de eso de que predican justo, pero justo, justo
lo contrario de lo que hacen por no tener
que escuchar que ando malmetiendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario